2.6.07

"OUT FROM THE DEEP" - ENIGMA


DISCO: The Cross of Changes (1993)

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De lejos, la canción más sublime de Enigma, colectivo musical que puedo disfrutar y apreciar por sus no pocas conquistas auditivas, y al mismo tiempo desmarcarme de cierto perfumillo de New Age esotérico y de la voz no precisamente agradable de Michael Cretu. Es una de las pocas cosas que lamento: que "Out from the deep" la haya cantado Cretu con su misticismo algo forzado y carrasposo, aunque los coritos femeninos lo compensan. Lo que me gusta de esta canción es la convivencia de la explosión cronometrada de la percusión electrónica con la tierna textura general. Por eso las sensaciones que despierta son irrepetibles.

Es uno de los videoclips más hermosos que he visto, sobre la base temática del mito de la Atlántida, y hoy me he dado cuenta de que en él se hace una referencia visual a la Sagrada Familia de Gaudí, para mí la obra maestra de la arquitectura religiosa universal. Y también me entero hoy que el video es autoría del gran director venezolano Ángel Gracia. We came out from the deep to learn to love, to learn how to live.

"I LIKE TO MOVE IT" - REEL 2 REAL


DISCO: Move it! (1994)
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Un palazo por toda la cara. Uno de los grandes temas bailables de todos los tiempos. Una genialidad. Esta canción es una de las pruebas de que el actual reggaetón no salió de la nada, sino que venía germinándose desde hace varios años en la sopa de cultivo del Caribe —Jamaica, el cuartel sónico general—, con predecesores de estatura como El General. "I like to move it" es un producto del encuentro del DJ de origen colombiano Erick Morillo y el rapper trinitario Mark Quashie (The Mad Stuntman, que luego colaboraría con Proyecto Uno). Escuchando esta locura, te sientes capaz hasta de tumbar a Chávez o de levantarte a Mónica Spear.

¿Quién sacó a "I like to move it" del olvido? La gente de PDI Dreamworks —garantía de antológicas películas de animación digital, al igual que su archirrival Pixar— con los lemures de Madagascar (1995). Un justo homenaje para la que, repito, es una de las grandes canciones bailables de todos los tiempos.

"MISTANEEK" - NATACHA ATLAS

DISCO: Gedida (1999)
VIDEO:
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A Natacha Atlas, cantante belga de origen magrebí, la conocí gracias al escritor Héctor Bujanda, autor de la novela La última vez y una autoridad de world music. Seguramente los tres discos originales de Natacha que tengo en casa los debo haber comprado en la era de oro de la tienda Esperanto. De Diaspora (1995) y Gedida (1999) podría sacar casi cualquier canción; el primero es muy espiritual, casi una letanía, y el segundo posee por ratos un frenetismo eufórico y divertidísimo.

¿Por qué escojo "Mistaneek"? Porque hasta el día de hoy no se me había ocurrido buscar en You Tuve videos de Natacha, y me encuentro con esta historia visual que tiene mucho que ver con una vivencia bastante frustrante que sucedió en este momento de mi vida. Yo me siento como el taxista de este videoclip: impotencia total. Y la cara narizona de Natacha me hace pensar mucho en la chica que me dejó mal.

Natacha es una señora, debe tener ya sus 43 años de edad; yo la conocí primero musical antes que visualmente, pero hay que acotar que, ahora que pierdo la virginidad al mirarla en imágenes en movimiento, se le nota extremadamente afianzada en su poderío de hembra pícara y además madura y cerebral.

1.6.07

"CELOSO" - LAS CHICAS DEL CAN

Cuando el merengue sacudió al mundo: Fernando Villalona, Bonny Cepeda, Wilfrido Vargas, Las Chicas del Can, etc. Período de plenitud como pocos. De Las Chicas del Can, mi favorita en perspectiva es, sin duda alguna, "Celoso". Un palazo por la cara. Qué pedazo de canción. Acid merengue con un vértigo que marea y te hace sentir indefenso, desprotegido ante un vómito de feminidad abusiva. "Palo, palo, mi ritmo trae palo...". El tema universal de los celos. No existe persona no-celosa, es una ficción.

Existe un video de una versión en vivo en You Tube (http://www.youtube.com/watch?v=9ATjijsAezY). No es la formación original de Las Chicas del Can, aunque igual se ven muy bien. Parecerán algo pasadas de kilos según los aburridos cánones contemporáneos, aunque para mí son fabulosas y muy sensuales. No quiero imaginarme lo que les dicen los hombres del público con esos trajecitos tan cacheteros.

"STITCHES" - ORGY


DISCO: Candyass (1998)
COMPOSICIÓN: Amir Derakh, Jay Gordon, Ryan Hewitt, Ryan Shuck
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Hay casos en los que el pueblo se equivoca, y de manera notable. Con su rock glam sintético, Orgy intentó nadar contra la corriente del metal hiphoposo a finales de los años 90 y principios de este siglo. Pegaron "Blue Monday", que no es muy representativa de su legado (además es un cover), y poco más. Se llevaron un lamentable platanazo con su segundo disco, Vapor Transmission, que a mi juicio era un trabajo tan respetable como el gran Candyass. Todo el mundo se empezó a burlar de sus maquillajes Max Factor. Qué lástima que a esta gente no le fue tan bien y que no se pudieran mantener en el negocio. Yo los recordaré por el resto de mis vidas, tanto por su música como por su empaque. Si yo fuera productor de una disquera, pagaría 500 millones de dólares por tener un cantante como Jay Gordon. Qué tipo tan hermoso, gallardo, fotogénico, siempre impecablemente vestido. Un Hércules con cara de niño. Es de esos carajos con los que uno quisiera intercambiar cuerpo.
"Stitches" (puntos de sutura) será siempre mi favorita de Orgy. Un tema clásico, redondo, tan perfecto como una noche en Las Mercedes con un automóvil descapotable. Tienen que ver el Family Values Tour 1998, cuando Jay Gordon canta con el micrófono volteado (http://www.youtube.com/watch?v=Lt_1WoKf5b0). Los sonidos sintéticos que se logran allí en vivo. Yo me podría morir. Mis adorables payasos incomprendidos: jamás los olvidaré. Gloria eterna para Orgy y su glamour.